Chema es el presidente del colectivo Soterranya, una asociación sin ánimo de lucro que lleva 20 años trabajando en la movilidad sostenible, el medio ambiente, la cultura y el bienestar social de las personas. En la semana Europea de la movilidad nos acercamos al local ubicado en Torrent para dialogar sobre otra forma de movilidad y ayuda social
E.- ¿Cuál es la misión principal de la organización?
C.- En principio era cambiar el mundo, pero eso es un poco complicado. Lo que queremos es abrir e intentar mejorar la vida de muchas personas.
E.- ¿A qué se debe el nombre Soterránya?
C.- Porque así se llama el barranco que existe en la zona de Torrent donde estamos actualmente.
E.- ¿Qué tipo de proyectos llevan a cabo para promover la sostenibilidad?
C.- Pues uno de ellos, por ejemplo, es el proyecto de Bicis para todas, que nació hace diez años. Surgió porque nos encontramos una bicicleta en el río Palancia y la retiramos porque era un residuo. La reparamos para donarla a alguien que necesite una bicicleta Y de esa bici al final, a día de hoy, llevamos 1070 bicicletas entregadas aproximadamente. Es un modelo de buenas prácticas porque es una economía circular. Los tres pilares de Soterranya son la solidaridad para proporcionar medios de transporte sostenibles a quien lo necesite, la sostenibilidad al fomentar el reciclaje y evitar basuras y fomentar la movilidad sostenible con la bicicleta como eje principal. Con el reciclaje, por ejemplo, se aprovecha el máximo número de piezas posibles para darle una segunda vida o las cubiertas que ya están gastadas se las damos a un artesano quien las transforma en pulseras, carteras, entre otras cosas.
E.- Hay un proyecto que he visto que se llama “En bici sin edad”. Cuéntame.
C.- Nosotros en el proyecto Bici para todas hace tiempo se nos donó unos triciclos que no sabíamos muy bien a quién le podíamos dar esos rodados y pensamos en un colegio de educación especial de aquí de Torrent llamada La Encarnación y se lo donamos a ellos. A raíz de eso, cuando vimos a un niño con parálisis cerebral moviéndose por primera vez en bici, que en un principio no quería subir, le cambió totalmente la cara de felicidad. Empezamos a pensar y buscamos una bici adaptada. Hablamos con una empresa de Chirivella (pueblo cerca) y nos fabricaron una bicicleta y a raíz de ahí empezamos con bicis inclusivas. A nosotros nos gusta mucho que todo el mundo pueda disfrutar de las actividades que hacemos en la asociación con la bici y entonces empezamos con eso. Sí que es cierto que después de esta acción en Copenhague se fundó el Cycling Age, que vendría a ser “bici sin edad”. Nosotros nos sumamos a uno de los capítulos que hay en España, a diferentes capítulos de ese proyecto internacional y Torrent Bicis para todas. Teníamos esa bici. Luego conseguimos presupuesto para comprar otra bici que lleva a dos personas. Lo que hacemos es pasear a personas mayores, personas con discapacidad o simplemente las prestamos a diferentes entidades que puedan necesitarla, como ser colegios, residencias y demás.
E.- ¿Cómo involucran a la comunidad local en sus iniciativas?
C.- Le intentamos involucrar y hacer diferentes actividades, abriendo el taller, como hemos hecho hoy que tenemos un “taller de puertas abiertas”. Abrirlas a todo el mundo, a toda la población.
Las jornadas de puertas abiertas solemos hacerlo varias veces, pero normalmente como estamos en la semana de la movilidad siempre lo hacemos de forma representativa. Nos involucramos con el barrio, hasta hemos apoyado un local y convertirlo en una biblioteca y aula justo en frente de nuestro taller.
“Llevamos 1070 bicicletas entregadas aproximadamente. Es un modelo de buenas prácticas porque es una economía circular”
E.- ¿Qué impacto han logrado hasta ahora y cómo lo miden?
C.- No lo medimos porque no podemos, pero impactos sí que hay. Podemos medirlo más o menos en general, pero sí que es cierto que vemos a mucha gente que, al tiempo de haberle donado la bicicleta, y que nos la hemos cruzado por Valencia o por cualquier sitio, reconocemos el rodado. Porque las bicicletas van todas identificadas con una pegatina del proyecto. Y entonces como vamos siempre en bici, muchas veces nos cruzamos con estas personas y nos cuentan su vivencia con la bici, de poder haber conseguido el trabajo, poder haber cambiado mucho. Mujeres maltratadas que han cambiado porque esa bicicleta ha sido una herramienta para poder relacionarse con gente y poder cambiar la vida que tenían antes. Un ejemplo que tengo es un compañero mío de trabajo que vino de Marruecos en una moto de agua de modo ilegal y al cierto tiempo se nos pidió una bicicleta desde una fundación. Esa fundación hacía cursos de electricidad y demás. El chico estuvo haciendo esos cursos de electricidad y gracias a la bici que donamos, el chico está trabajando conmigo en una empresa y lleva tres o cuatro años trabajando a mi lado. Entonces es algo que quieras que no, sí que se nota.
E.- Cuales son sus planes a futuro?
C.- Nuestros planes a futuro es seguir concienciando a la gente de que la movilidad sostenible y que el espacio público es para las personas y cambiar ese chip de coche que podemos llamar a eso a otro modelo diferente que a largo plazo no tiene solución.
E.- ¿Como pueden las personas contribuir o apoyar su trabajo?
C.- Dando visibilidad y a que vengan. Siempre hemos necesitado voluntarios, sin ellos no podríamos avanzar. Estamos encantados de recibirles, porque de momento somos poca gente. Nos gustaría ser más y poder dar respuesta a las tantísimas peticiones que tenemos de bicicleta. Estamos en el barrio del Xenillet de Torrent (Horta Sud de Valencia). Por la característica marginal que tiene el barrio este proyecto a impulsado a mejorar a todos aquellos ciudadanos su calidad de vida.
E.- ¿Qué consejos tiene para aquellos que deseen iniciar su propio colectivo de ayuda sostenible?
C.- Pues, rodearse de gente. La verdad que aquí, por suerte, tenemos unos voluntarios que prácticamente somos como una familia y que aparte de que trabajamos mucho y salimos juntos y tal. Al final hemos creado un vínculo muy grande. Entonces es rodearse con personas, ponerle mucha ilusión y mucho empeño, que con dinero se hace muchas cosas, pero sin dinero también se pueden hacer. Muchas cosas se han acabado sin coste alguno.
E.- ¿Han tenido alguna colaboración con otras organizaciones o colectivos similares?
C.- Sí. De hecho, Bici para todas empezó con otra asociación. Colaboramos con diferentes asociaciones como, por ejemplo, San Juan de Dios, con Cruz Roja, con Valencia Acoge, entre otras, que nos envían demandantes de bicicleta y alguna vez hacemos algún cursillo o algún taller para esas entidades en aprender a arreglarse la bici que es muy práctico.
Autor
Últimas entradas escritas
Entrevistas2 julio, 2025Movilización nacional para visibilizar la prevención del suicidio
Cultura27 junio, 2025“Grup Natural” en Cinema Jove: Nina Solà retrata la adolescencia desde dentro del aula
Cultura26 junio, 2025Mateo Baselga: “Necesitamos un hogar para poder estar tranquilos”
Cultura24 junio, 2025Alberto Morais: “Mi película plantea algo tan básico como volver a mirar al otro con humanidad”